La ministra de Energía, Susana Jiménez, anunció esta tarde en el Congreso, que el Gobierno está en conversaciones con las empresas eléctricas para que éstas paguen a los clientes por el retiro de los medidores antiguos de las viviendas.
"Tenemos una serie de medidas que vamos a llevar a delante: la primera de ella, es que estamos explorando la posibilidad de que las empresas le compren a las personas (propietarias) que tenían en su propiedad un medidor, al momento de hacer el recambio, porque al momento en que se dictaminó en que se iba a cambiar los medidores para mejorar la calidad del servicio, no se contempló que esas personas, ese mismo día, tenían un medidor que ya perdía valor", dijo la secretaria de Estado.
Respecto de cómo se haría el pago de parte de las empresas, la ministra dijo que es algo que aún se está evaluando, pero aclaró que debe ser de la forma más inmediata posible, y que sea un beneficio directo a las personas, y por lo tanto, los detalles de cómo se haga, si es a través de un descuento en las boletas, todo eso se va a poder afinar una vez que terminemos de conversar".
Otra medida, según agregó Jiménez, es que evalúan nuevos cambios a la ley de distribución, para "introducir más competencia, más actores, más servicios, que beneficien a los consumidores" y que afecten a la tarificación de las boletas eléctricas.
"Vamos a revisar criterios fundamentales para la determinación de tarifas, entre ellos la rentabilidad de las compañías. Esto es un mercado regulado, y lo que queremos es que se le preste el mejor servicio a las personas, al menor costo posible, y por lo tanto, eso se traduzca en tarifas, y eso es parte de lo que ya estamos revisando a la ley de distribución", afirmó la ministra.