Este sábado 1 de junio el Presidente de Chile se dirigirá al país, para dar a conocer la Cuenta Pública 2024, donde informará los logros y nuevos compromisos de su Gobierno, además de importantes anuncios.

Esta tradición republicana, donde el Ejecutivo rinde cuentas ante otro poder el Estado, el Congreso, para transparentar su gestión, abre la puerta para que la ciudadanía evalúe su trabajo y a la vez, exija.

Y desde La Araucanía, la línea editorial de este medio de prensa regionalista, ciudadano y pluralista, cree necesario mencionar lo que se espera de su gestión, acorde a sus compromisos de campaña y a las características de su Gobierno.

1. Diálogo real, donde el comentario, por ejemplo, de las comunidades indígenas no sea que en el gobierno de Piñera nos iba mejor o nos escuchaban más y donde incluso, uno de los líderes de Temucuicui mencionó que "con Kast nos habría ido mejor"; habida consideración del encauzamiento -muchas veces- sin prueba de voceros y dirigentes mapuche, donde el comienzo a la solución del mal llamado "conflicto mapuche", deviene de negociaciones políticas y no desde la represión policial, que sólo crea, educa e inculca más odio hacia el Estado chileno, por la vía de la opresión, humillación y sufrimiento de niños mapuche.

¿Quién no crecería con rencor hacia el que humilló a su madre, la golpeó o la retuvo en el piso, con la cara en el barro, muchas veces sin justificación?

Sin embargo, las víctimas de la violencia rural y del terrorismo también deben ser justamente acogidas y efectivamente compensadas. No con las migajas que se entregan a través de becas de estudio u obligándolos a postular a programas de Sercotec. Así, si a alguien le queman su casa y construirla de vuelta sale $100 millones, eso es justamente lo que tendrán que recibir, no un proyecto de incentivo al emprendimiento, sujeto a postulación. Por otro lado, quienes eligen seguir viviendo en su propiedad, tienen que estar efectivamente protegidos, no convertirse en campos de tiro, como ocurre en muchos casos.

Y en otro ámbito, pero vinculado estrechamente al diálogo está la escucha, donde si el Gobierno realmente oye a sus ciudadanos, no debiera licitar una doble vía Freire Villarrica con peaje, como acaba de anunciar la ministra de Obras Públicas -en contra de la ciudadanía-, entregándole además un pingüe negocio a los empresarios que cobren el pago, nada menos, que por 40 años.

2. Acciones reales, donde los hechos tengan correlato con los discursos. Hoy se incentiva la producción, se habla de ayuda a los agricultores, pero BancoEstado castiga la tasación de los predios agrícolas ubicados en la llamada "zona roja". Uno podrá entenderlo de los bancos comerciales, pero de la casa bancaria del Estado chileno, no. Recientemente un predio de Traiguen fue "castigado" en su tasación por BancoEstado, disminuyendo su valor de hace dos años por estar a 10 kilómetros de donde haba sido un atentado.

Por otro lado, no podemos dejar de lado el cumplimiento de los compromisos de Estado, por ejemplo, con el Medioambiente y donde, a más de 5 meses de rechazada la planta para quemar basura en Lautaro, WTE Araucanía, el Comité de Ministros aún no saca la resolución de su rechazo, otorgando tiempo a los empresarios y al abogado lobista dueños de la empresa, para preparar la apelación al tRIBUNAL Ambiental

3. Demandas ciudadanas, realmente atendidas, donde por ejemplo si la gente pide la condonación del famoso CAE, sea a quienes lo necesitan más no a quienes pueden pagar, premiando sin embargo a quienes sí han pagado, por ejemplo, con alguna franquicia tributaria.

Y si realmente queremos que La Araucania surja y que la prosperidad le gane a la pobreza, la receta ya se ha probado y ha funcionado en múltiple lugares del mundo, con un resultado siempre exitoso: declaremos la región como libre de impuestos e incentivemos la instalación de industrias en La Araucanía. Simple, aunque se oponga Marcel.

Asimismo, escuchemos a las dueñas e casa, a los papás e incluso a los niños y nos les quitemos nuevamente el computador que se merecen los alumnos vulnerables de las escuelas particulares subvencionadas de La Araucanía. Comenzó a suceder nuevamente y los parlamentarios -de derecha e izquierda- se hacen los sordos. No hay plata dicen.

Según los filósofos entendidos, la Democracia es la administración de los problemas, habida consideración de una escasez permanente de recursos. Así, señor Presidente, siga resolviendo los problemas más urgentes de la gente y administre el resto para el próximo Gobierno.