Fueron varios menores, algunos de solo meses de edad, los que fueron llevados por sus madres al cuartel de la 2º Comisaría COP de Carabineros, ubicada en Pailahueque, Ercilla, con el fin de ser usados como "escudos humanos", como dijo el diputado de RN Miguel Mellado, o al menos para entorpecer la labor policial, por cuanto los procedimientos adoptados debieron considerar su presencia, mientras el recinto policial era atacado por estas mujeres el pasado 8 de marzo (8M).

Por lo mismo, a las tempranas voces de parlamentarios, se unió la Defensora de la Niñez. "... nuestro equipo en La Araucanía y sede central ha estado desde ayer recabando la información con Fiscalía, Carabineros e INDH, para conocer la situación de niños, niñas y adolescentes involucrados en este hecho y puestos en evidente riesgo", señalaron el jueves pasado.

"Exponer a niños, niñas y adolescentes a la comisión de un delito inadmisible y tan grave como atacar un cuartel policial, arriesga severamente su integridad y su vida, lo que resulta inaceptable y debe ser abordado por el sistema como una grave vulneración a sus derechos", manifestaron.

"En ese sentido, verificamos que Carabineros ya presentó denuncia por vulneración de derechos en el Tribunal de Familia competente y esperamos que este, conforme a sus privativas facultades, determine rápidamente las medidas que protejan la vida e integridad de niños involucrados", agregaron.

"Implicar a niños en un ataque a un cuartel policial es una grave e inaceptable vulneración a sus derechos, considerando la posible defensa legítima ante el ataque. En ese escenario, reconocemos la labor policial q en esta ocasión aplicó protocolos ajustados al trato de NNA", finalizaron desde la Defensora de la Niñez.