Sin que se esperara la resolución de los procesos administrativos en curso, el viernes pasado se confirmó la remoción de su cargo de la ahora exseremi de Justicia Hellen Pacheco -militancia desconocida-, cuya salida era demandada desde hace meses por los gremios de funcionarios públicos, tanto del propio servicio, como de la ANEF.

La determinación se adoptó luego de que La Moneda le solicitara su renuncia al puesto que ocupaba desde que asumió el Gobierno del Presidente Boric, no obstante que anteriormente el delegado presidencial en La Araucanía José Montalva, había asegurado que se respetaría el debido proceso.

“Los protocolos que existen hoy día son lentos y que no dan cuenta la rapidez que se pide por parte no solamente de los denunciantes, sino también por parte de los denunciados; para poder garantizar sus derechos”, dijo, adelantando en su oportunidad que se esperaría a que se resolvieran los procesos pendientes.

Pero la presión fue más fuerte, no sólo en el caso de Hellen Pacheco, sino también con la ya removida seremi de Educación María Isabel Mariñanco. “Seremi de Justicia y Derechos Humanos, denunciada por atropello a la dignidad a través de acoso, vulneración y maltrato. Seremi de Educación, acusada por acoso y maltrato laboral. ¿De qué estamos hablando? Más de cuatro meses que el tema se hizo público y todavía no se hace nada. Eso es lo impresentable. Los sumarios pueden perfectamente continuar”, manifestó semanas atrás la presidenta de la ANEF (Agrupación Nacional de Empleados Fiscales), Sandra Marín, y surgió efecto.