Fue una espera incansable a las afueras del Servicio Médico Legal de Temuco, para los familiares de los agricultores asesinados este viernes en la ruta S-210 en un sector rural de Carahue.

Se trataría de un tío y su sobrino que fueron atacados por sujetos presuntamente encapuchados, con vestimentas "oscuras", quienes portarían armas de calibre 9 mm y dispararon en contra de Gastón y Cristóbal Aravena. 

Los hechos habrían ocurrido a eso de las 14:00 horas en un sector rural de Carahue, en las cercanías de Villa La Araucaria, donde fue quemado vivo un matrimonio, falleciendo Hernán Allende días después. Fue luego de haber “intercambiado” algunas palabras que los antisociales, que se trasladaban en a lo menos tres camionetas con vidrios polarizados, dispararon a las víctimas.

Por instrucción de la fiscalía, Carabineros del OS-9 y el laboratorio de criminalística comenzaron con las primeras indagaciones para esclarecer en qué circunstancias ocurrieron los hechos y para dar con los responsables del hecho que sumó dos víctimas fatales en La Araucanía, puesto que por el momento no hay sospechosos ni detenidos. 

SML

Y es que tras confirmarse su fallecimiento, los cuerpos fueron trasladados hasta el Servicio Médico Legal de Temuco para realizar las pericias correspondientes, en donde se habría confirmado que el joven de 21 años fue baleado en su cabeza, mientras que su tío en el rostro.

Fueron más de 7 horas las que debieron esperar sus familiares para poder trasladar los cuerpos hasta Nueva Imperial, al velatorio Muñoz, donde los recibieron sus más cercanos para recordarlos y asimismo exigir justicia y que este caso no quede impune. 

Diálogo

Cabe mencionar que los familiares criticaron que el gobierno entrante se manifieste a favor del “diálogo y no de la mano dura” pues aseguraron sentirse abandonados y no representados por quienes no “entienden el nivel de violencia que se vive en la región”. 

Así las cosas que hoy domingo a eso de las 16:00 horas, se dará el último adiós a quienes dijeron ser personas felices, alegres, esforzadas y humildes que se convierten en las nuevas víctimas fatales en la Macrozona Sur, mientras la impunidad se mantiene y se suman dos nuevas víctimas al listado de crímenes sin aclarar.