Todos se apuraron en celebrar la captura del exsacerdote jesuita Luis García-Huidobro, luego de que una víctima del atentado incendiario de octubre de 2021 en el fundo Casablanca, en la comuna de Carahue, dijera reconocerlo tras haber increpado a uno de los atacantes el día en que le quemaron su casa.

Según la mujer, al decirle que diera la cara, uno de los atacantes se la habría descubierto, reconociendo después, con fotos que le mostraron en la Policía de Investigaciones (PDI), a García-Huidobro. Con este testimonio, el juzgado de garantía de Carahue lo dejó en prisión preventiva, trasladándolo Gendarmería a la cárcel de Valdivia.

Sin embargo, Luis García-Huidobro, apenas pudo comunicarse con el exterior -a través de una carta-, desmintió lo sucedido y dijo no tener nada que ver ni con la Weichan Auka Mapu (WAM), ni con el atentado en el que dicen que participó. 

"Les escribo para decirles que no tengo ninguna relación con el atentado en que se me acusa, en la comuna de Carahue. Nunca he estado en tal "Fundo Casa Blanca", ni sé en dónde está ubicado dentro de esa comuna, ni sé nada sobre sus propietarios ni de sus trabajadores, más de lo poco que se dijo en la audiencia", dijo García-Huidobro.

"No pertenezco ni he pertenecido en el pasado a la organización WAM, la cual habría realizado este atentado según lo dicho en audiencia, ni me siento identificado con sus planteamientos ideológicos y acciones", agregó el exsacerdote.

Víctima

En relación a la mujer que dice haberlo visto y lo habrÍa identificado con ayuda de la PDI, dice que no sabe porqué dice que lo vio. "No puedo juzgar a la persona que me acusa, y cuyo único testimonio me tiene aquí, pues no sé nada de ella. No sé si fue inducida por la policía, si estará mintiendo deliberadamente, o si acaso está en un error del cual ella misma esté honestamente convencida", manifestó García-Huidobro.

"Confío en que al llegar el juicio pueda desecharse esta falsa o errónea acusación, y yo pueda volver con mi esposa e hijos, de quienes he sido injustamente separado", añadió.

Ayuda de amigos

Por otra parte, el exsacerdote pidió ayuda a sus cercanos para que pueda demostrar que el día del atentado él no participó y que estaba en otro lado. "A los amigos y conocidos con quienes pueda haber tenido contacto en octubre de 2021, les pido encarecidamente si pudieran revisar sus teléfonos, por si acaso hubiera una comunicación que me pudiera ayudar a demostrar dónde estaba yo ese día, 25 de octubre de 2021, o qué estaba haciendo, ya que mi teléfono y computador fueron incautados", dijo García-Huidobro.

"Actualmente estoy recluido en la cárcel de Valdivia, muy lejos de mi esposa e hijos, y hoy viernes 5 de abril recién pude ser visitado por ella, con quién les envío esta carta", agregó. 

"Muchas gracias a todos quienes han tenido muestras de aprecio y solidaridad con mi esposa e hijos en estos días, les estamos muy agradecidos", finalizó el exsacerdote jesuita.