Esta abogada de Temuco pasa gran parte de su tiempo enseñándole a otros lo que más le gusta y de lo que mucho sabe: el cultivo de hongos comestibles, una actividad de la que poco se conoce en Chile, pero que día a día gana adeptos. Más aún con profesionales que, como Daniela, están dispuestos a transferir sus conocimientos, como hace ella en talleres a adultos mayores o juntas de vecinos.

Respecto al compostaje, la abogada cuenta que comenzó a hacerlo luego de visitar y relacionarse con el entorno del vertedero Boyeco, en Temuco. "Me cuestione el impacto que genera la basura, la mía y de los demás, en el medio ambiente y en la vida de otras personas. La visión del vertedero era apocalíptica por decirlo de alguna manera", dice Daniela.

"En Boyeco hay una escuela y un consultorio al frente del vertedero, que ya no esta en operación como es de público conocimiento. Pero los efectos de su impacto en la tierra, en el agua y en la forma de vida de las personas que habitan en su cercanía (principalmente mapuche) se mantendrán aún por muchas generaciones", cuenta la abogada.

Por lo mismo y luego de trabajar como abogada del consejo de salud territorial de Boyeco, lograron junto a otra abogada y a los vecinos del sector, que se declarara que el vertedero estaba en incumplimiento. "Luego la municipalidad presionó a la empresa para que cumpla los plazos del plan de cierre y así sucedió, en medio de nuestra incredulidad", dice Morales.

El compostaje

Fue después de esta experiencia que la abogada decidió hacer algo directamente con los residuos sólidos de su hogar además. "Concretamente comencé a enterrar mi basura orgánica en el patio de mi mamá, y así aproveché de mejorar la tierra. A mi madre en ese entonces no le gustaba la idea, pero cuando en el patio comenzaron a brotar zapallos y tomates, ella sola me guardaba los restos vegetales", cuenta Daniela.

"Después fui replicando la misma idea en otras casas, pero luego me aburrí de hacer hoyos y pase a la compostera grande, así aprovecho de cosechar compost", dice la abogada.

Su proceso

Daniela cuenta que para compostar va juntando los restos orgánicos vegetales en su cocina, para luego, llevarlos a la compostera que tiene en el patio. "Tengo un recipiente del porte de una olla en la casa, donde dejo los residuos de la cocina, cuando se llena lo llevo a la compostera que esta en el patio", relata.

Cuenta además que sólo pone restos vegetales y que cada uno o dos días, máximo tres, lleva lo que reúne a la compostera. "Es relativo, depende de lo que cocine, no soy vegetariana pero como hartas verduras. Pongo sólo restos vegetales, o restos pequeños de madera como fósforos, papel tissue (servilletas), cartón, aserrín, y similares", dice Daniela Morales.

La abogada cuenta que redujo su basura muchísimo y que "cosecha" su compost dos veces al año. "Ahora saco la basura cada 2 semanas o más algunas veces. Lo orgánico es más de la mitad, quizá un 70%. Y cosecho mi compost dos veces al año, en verano y ahora en septiembre", dice Daniela.

"... es fácil, barato, hay diferentes técnicas según si se tiene o no un patio, hoy incluso la municipalidad permite rebajar el pago de derechos de aseo, pero en general es una práctica que nos ayuda a nuestro medio ambiente y a todos en general", finaliza la abogada y aconseja hacerlo.

Hongos

El cultivo de hongos comestibles es su pasión y cuenta que siempre le ha gustado la agricultura y la naturaleza. "Tengo la suerte haberme criado en la Patagonia cerca de mucha naturaleza. En el año 2015 me propusieron armar un cultivo de hongos en Villarrica y comencé estudiar lo que más pude", dice Daniela Morales.

"Ese primer cultivo me motivo a seguir aprendiendo y a vincularme con organizaciones que trabajan en temas de divulgación, como el museo del hongo y participo anualmente del Fungifest en Valdivia, también es otra fuente laboral ya que hago asesorías a instituciones públicas como municipalidades e Indap", relata Morales.

"En fin, aprendí que los hongos son los grandes recicladores de la naturaleza y pueden ser una gran oportunidad si queremos avanzar en un futuro verde", puntualiza la abogada.

"Compostando La Araucanía" es un proyecto financiado por la Secretaría General de Gobierno y el Gobierno Regional de La Araucanía, que en conjunto con AraucaniaDiario, pretenden dar a conocer y difundir las buenas prácticas del compostaje domiciliario, como una solución al problema de la basura.