La contaminación acústica no solo se vive en las playas del litoral, con radios o equipos musicales, si no también en las playas del sur de Chile, pero proveniente de otra fuente: las lanchas y vehículos a motor. Este tipo de ruido -algo innegable y que no necesita estudio- es uno de los tipos de contaminación que buscaba evitar la ordenanza que dictó el municipio de Panguipulli en 2021, prohibiendo todo tipo de vehículos a motor dentro de las aguas de los lagos existentes al interior de la comuna: Calafquén, Pellaifa, Pullinque, Neltume y por supuesto, Panguipulli.

Medida muy valorada entre quienes no tienen lanchas o vehículos acuáticos a motor, fue combatida desde un comienzo por quienes sí poseen este tipo de vehículos, ya sea alegando un derecho adquirido, o simplemente, un derecho a tener y utilizar estos vehículos donde les plazca. Sin embargo, la autoridad edilicia, el alcalde Pedro Burgos (Independiente de centro izquierda) junto a cuatro concejales se mantuvieron firmes y el martes 28 de diciembre de 2021, aprobaron la ordenanza municipal que prohíbe la navegación de embarcaciones motorizadas en tres lagos de la comuna: Calafquen, Pellaifa y Pullinque.

Al respecto el alcalde Burgos explicó en ese momento: “esta es una ordenanza producto de un trabajo que se viene realizando hace un tiempo donde había un rol importante de las autoridades ancestrales de la Cuenca del lago Calafquén, desde el sector de Huitag a Coñaripe. Siempre hubo altura de miras para llegar a este documento que fue aprobado el día de hoy”.

Proceso judicial

Pero el poder puede más y apenas se decretaba la medida, ésta quedaba paralizada a la espera de la resolución de sendos recursos judiciales, uno de ellos interpuesto por 44 dueños de lanchas que pretendía seguir utilizándolas, no obstante las opiniones en contra.

En primera instancia, los particulares no tuvieron éxito, ya que la Corte de Apelaciones de Valdivia rechazó el recurso de protección para frenar la medida. Sin embargo, acudieron a la Corte Suprema, tribunal que finalmente decidió acoger el planteamiento.

De acuerdo a la Suprema, la ordenanza “carece de una sólida base técnica, manifestada en informes y presentaciones científicas de expertos en la materia y la normativa contemporánea sobre protección del medio ambiente”, algo que la abogada Karina Riquelme, quien representa a 14 lof de la cuenca del lago Calafquén, calificó como una noticia "triste", ya que la medida que había dictado el concejo municipal de Panguipulli había nacido del diálogo con comunidades indígenas, comerciantes, habitantes de la comuna y en general, con la sociedad civil.

“Este diálogo no fue respetado por la Corte Suprema y va a traer como consecuencia entonces que los lagos se sigan contaminando, lo que nos parece irrisorio", dijo Karina Riquelme.

"Con esto la Corte Suprema, al decide autorizar a unos pocos visitantes temporales -que mantienen propiedades a las orillas del Calafquen y tienen lanchas-, porque no es la comunidad que vive en el sector y que habitan todo el año en el lugar quienes usan lanchas y vehículos motorizados, sino que se trata de personas que tienen una segunda o tercera vivienda y que la habitan solo para recrearse", agregó la abogada.

"El derecho a recrearse de estas personas, que están individualizadas en todos los recursos, incluida una inmobiliaria, no puede ser más importante que el derecho a preservar el agua y la vida para las generaciones venideras”, manifestó Riquelme. 

Con esta resolución judicial se cae la ordenanza municipal que en diciembre de 2021, se cuadró con la opinión y el sentir mayoritario de la gente -de los que no tienen lanchas obviamente- y estos lagos podrán seguir siendo contaminados con hidrocarburos, así como también con los ruidos que estas anchas, motos de agua y vehículos acuáticos emiten.